Tenemos que prepararnos para la competencia de famosos metidos a cuentistas o ha escribir “seudo” literatura infantil.
Gloria Estefan y Julie Andrews, se prestaron a hacer de cuentacuentos en un evento social organizado en Nueva York. Ambas han declarado su intención de escribir cuentos para niños.
En España, Ana Botella fue pionera con su libro " Erase una vez... Los mejores cuentos comentados". La esposa de José María Aznar y concejala de Asuntos Sociales de Madrid se lanzó a interpretar de forma personal, desde una óptica pretendidamente pedagógica, una recopilación de cuentos seleccionados por ella. Y transformados en meros cuentos de propaganda religiosa y tendencias políticas conservadoras. Años más tarde, poseída de nuevo por ese altruista espíritu didáctico, se atrevió a dar una lección magistral sobre las posibilidades de reproducción entre una pera y una manzana gays.
Paloma Lago ha sido otra española que también se ha animado hacer su aportación a la literatura infantil, su último libro, "Cuentos de Paloma Lago ", fue publicado hace poco más de un año. Y como dice un amigo mió, si tuviéramos que opinar, solo diríamos “huir”.
Entre los famosos internacionales que se adelantaron a Estefan y Andrews en esta iniciativa están Madonna, John Travolta, Sarah Ferguson, Jamie Lee Curtis y Bill Crosby. Incluso Victoria Beckham ha expresado su deseo de escribir una obra literaria infantil, a pesar de que la cantante aseguró en su día que nunca se había leído un libro.
El santo de los cuentistas nos pille confesados.
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